Athletic club de bilbao - real betis balompié [post oficial]

Repite la racha de cuatro derrotas seguidas casi contra los mismos equipos

Con el tropiezo de ayer en Bilbao, el Betis ha conseguido igualar su peor racha de la presente temporada. Son cuatro derrotas consecutivas y lo ha hecho casi con los mismos rivales. Dirigido entonces por Chaparro, los heliopolitanos no hicieron más que caer desde la jornada decimoquinta a la decimoctava y ahora, con Nogués en el banquillo, han alcanzado este cero de 16 que lo inunda de preocupación, como se puede leer en ABC de Sevilla.

En la primera vuelta, los béticos tropezaron ante el Atlético (2-0), Athletic (0-1), Almería (1-0) y Málaga (1-2), mientras que más recientemente se ha visto superado de manera consecutiva frente a Valencia (1-2), Español (2-0), Atlético (0-2) y Athletic (1-0). Curiosamente las dos rachas tienen guarismos goleadores también similares, puesto que si en la primera hizo sólo un gol y encajó seis, ahora su celebración anotadora también ha sido individual y vio cómo le marcaban siete tantos.

Hoy no entrará en descenso

Ocurra lo que ocurra esta tarde el Betis no estará entre los tres últimos, ya que el enfrenamiento directo entre Getafe y Osasuna impide que alguno de los dos supere a los béticos. El Sporting, a tres puntos, podría igualar al Betis pero éste le gana el goal-average

Oliveira: “Sabemos el riesgo que corremos, pero dependemos de nosotros”

Es uno de los pesos pesados del vestuario bético y el único que dio la cara tras el encuentro contra el Athletic de Bilbao. El delantero reconoce que está pasando por un mal momento personal, así como que el equipo está en una situación complicada, pero está convencido de que el Betis saldrá de ella: “Hoy nosotros no tenemos nada que reprocharnos, porque hemos peleado y luchado. Lo único que puedo decir es que no podemos luchar contra que la pelota no entre. Creo que hoy debimos empatar el partido e incluso ganarlo, pero hemos tenido un fallo defensivo y hemos perdido. Nosotros sabemos lo que nos estamos jugando. Sabemos el riesgo que corremos, pero dependemos de nosotros mismos, no de los demás. Hay que seguir trabajando y no venirse abajo porque no es el momento. Estamos tristes, yo el primero, pero estoy seguro de que vamos a sacar esto adelante”.

No está acertado de cara a gol y Olivera lo reconoce: “Hoy el equipo ha corrido, ha peleado, hemos tenido ocasiones, yo el primero, pero el balón no ha entrado. Cuando no entra hay que asumir la responsabilidad y nunca bajar los brazos, porque nos quedan tres finales. Yo creo que el partido hubiera cambiado. Su hubiéramos  metido un gol en cualquier momento, hubiera cambiado el partido. Yo reconozco que tengo una mala racha, que no estoy acertado y esto me afecta porque perjudica al equipo. Seguiré trabajando porque yo no soy de los que bajan los brazos. Esperemos que esto pueda cambiar. La clave ha estado en la delantera. No hay que reprochar nada a nadie. Todos hemos luchado, pero la clave ha sido los fallos de la delantera. Yo asumo mi responsabilidad”.

Damiá sufre una subluxación de clavícula

Dos futbolistas del Real Betis terminaron tocados el encuentro ante el Athletic de Bilbao. Edu sufrió un encontronazo cabeza con cabeza con Amorebieta en el minuto 78, lo que le causó una brecha en la frente. El futbolista pudo terminar el partido con un aparatoso vendaje y en las próximas horas habrá que ver el alcance real de la lesión, aunque no parece que corra peligro su participación para medirse al Almería. Más complicado lo tiene Damiá que, aunque también terminó el partido, sufrió una subluxación de clavícula, por lo que se le van a realizar pruebas nada más llegar a Sevilla, ya que no se descarta que pueda haber una fractura. Por lo demás, Mark González, tocado durante toda la semana, jugó 45 minutos y no sufrió ningún percance.

Capi: "La opinión de la gente hay que respetarla, es lógico que protesten cuando las cosas van mal"

Siempre que comparece de forma pública, habla de forma bastante clara tanto sobre su situación personal como de todo lo que rodea al equipo, por eso siempre es interesante hablar con Capi en una semana tan convulsa como esta, tras la derrota ante el Atlético de Madrid y los cánticos y las pancartas que se exhibieron contra los jugadores al término del encuentro.

Las pancartas y los pitos de la afición no sentaron bien en el vestuario, pero Capi le da una lectura más positiva y argumenta que "todo lo que son insultos o pitos de tu propia afición a uno no le gusta, pero dentro de este deporte existe eso. Cuando lo haces bien, todo son aplausos y cosas buenas y cuando las cosas van mal es normal que surjan todo este tipo de cosas. La opinión de la afición hay que respetarla, nosotros no podemos estar pendientes de eso, ellos pagan sus carnets y sus entradas durante todo el año, quieren ver a su equipo ganar y cuando no lo ven, es lógico que protesten de cualquier forma”.

Tampoco la derrota frente al conjunto colchonero gustó al equipo por lo que ya hay que centrarse en el siguiente encuentro, el de mañana en San Mamés ante el Athletic de Caparrós: "Nos lo tomamos mal porque estamos deseando conseguir esa victoria que prácticamente certifique la salvación. El otro día no pudo ser y ahora lo que queda es pensar en el siguiente partido, porque todavía quedan cuatro y el más importante lo tenemos en el siguiente, que es en Bilbao y yo creo que se le puede ganar. El equipo va con muchas ganas y mucha ilusión de conseguir esa victoria”, dijo.

Nadie en el Bocho habla del encuentro de mañana ante el Betis, lógico por otra parte, porque cuatro días después el Athletic tiene una cita con la historia, ya que disputará la final de la Copa del Rey en Valencia frente al Barcelona, algo que aún así no cree Capi que pueda influir en el partido y en el conjunto verdiblanco, que tendrá que salir a ganar igualmente: "Tenemos que pensar en nosotros mismos por la situación en la que nos encontramos y no podemos pensar en lo que pueda hacer o sacar de inicio el Athletic. Juegue quien juegue es el Athletic Club de Bilbao, que está en Primera División, con buenos jugadores y que nos lo va a poner difícil. Vamos a centrarnos en nosotros, en corregir los errores que hemos tenido y sobre todo en hacer un gran partido para ganar y conseguir esos cuarenta puntos que nos darían la tranquilidad necesaria para afrontar el final liguero”.

Hablaba Capi también de la situación en la que se ha convertido este final de Liga para el Betis, que se esperaba algo más tranquila con las dos victorias seguidas ante el Racing y el Sporting, pero algo más preocupante con las últimas tres derrotas frente al Valencia, Español y Atlético de Madrid y decía que "cuando llegó el nuevo míster conseguimos dos victorias muy importantes porque estábamos a un punto del descenso, se consiguieron seis puntos y nos pusimos a siete de diferencia y después vino el Valencia, que nos complicó un poco porque es un equipo muy fuerte arriba; luego jugamos con el Español muy mal, fue un partido malísimo y el otro día contra el Atlético tampoco es que el equipo estuviera mal, tampoco bien, pero no fue un partido desastroso, lo que pasa es que por el ambiente que había y que el Atleti es un equipo que llega muy pocas veces y te hace goles y en ese aspecto nos ganó la partida”.

Capi tuvo una clara ocasión justo antes del descanso ante el Atlético en el último partido en casa, algo de lo que se lamenta y mucho, por lo que podría haber supuesto para lo que restaba de encuentro: "la vi tan clara que no me lo creí cuando ya vi que se elevó tanto el balón, pero bueno son ocasiones que quizás hubieran marcado el partido porque era justamente antes de terminar la primera parte, hubiese sido ese empate y quizás hubiera cambiado todo. Ahora tenemos otra oportunidad muy grande, ya lo que hemos hecho atrás no podemos volver a pensar en ello y tenemos que pensar en la siguiente semana”.

Era cuestionado, además, por los puntos o victorias que le bastarían al Betis para confirmar definitiva y tristemente una temporada más la permanencia en la máxima competición liguera nacional, a lo que contestó que "creo que con una victoria más bastaría, pero tampoco digo que ganemos un partido más y los otros tres los tiremos, vamos a intentar en estos cuatro partidos sumar los máximos puntos posibles pero está claro que la barrera está en 40-41 puntos, va a ser muy difícil, los equipos que están abajo para llegar a esa cantidad de puntos tienen que ganar un partido más que nosotros, o en algún caso, a los que le ganamos el goalaverage tendrían que ganar todavía otro más, por lo que va a ser muy complicado hacer cábalas. Ya te digo, nosotros vamos a centrarnos en cuarenta puntos y primero ganar un partido que nos daría la tranquilidad necesaria para afrontar los siguientes encuentros”.

Para concluir, Capi nos hablaba de un libro, a modo de biografía, que Manolo Méndez, un periodista sevillano le está escribiendo sobre su vida profesional como jugador de fútbol: "ya llevamos mucho tiempo trabajando en ello. Fue una iniciativa del periodista sevillano Manuel Méndez y me lo comentó, le dije que me parecía bien contar toda mi vida profesional en el fútbol que ha sido toda entera aquí en el Betis prácticamente; en el momento en el que deje de jugar, sacaremos el libro y espero que le guste a la gente. En el momento en el que ya me retire lo publicaremos", finalizó Jesús Capitán, 'Capi'.

El Betis se asoma de nuevo al precipicio tras una humillante derrota en Bilbao

El Betis es un cadáver, un fantasma de equipo que parece empeñado en despeñarse a Segunda división. Ayer, ante los suplentes del Athletic, sumó una humillante derrota que le complica sobremanera la permanencia.

Y el gran problema es que a los futbolistas parece darles igual, pues de otra forma no se entiende su falta de tensión en el inicio del partido y la ridícula forma de presionar en los compases finales, que los de Caparrós vivieron de forma plácida ante la falta de recursos de los verdiblancos para tratar de poner cerco y, al menos, meter algo de miedo a los locales por los aledaños de la meta de Armando.

Otra vez fue patética la puesta en escena de los béticos, que en momento alguno fueron capaces de transmitir lo mucho que se estaban jugando, nada menos que la permanencia y quién sabe si la misma supervivencia del club, que anda herido de gravedad desde hace años y al que un descenso podría suponer la mismísima defunción. Pues nada, los cachorros bilbaínos –Caparrós sólo alineó a un titular– camparon a sus anchas, sólo vieron inquietada su meta en una acción personal de Edu (17’) y cobraron ventaja al filo de la media hora al aprovechar el habitual regalo de la blandísima zaga bética, que permitió a Ion Vélez (28’) fusilar desde cerca a Ricardo sin ningún tipo de oposición.

Noguès, que se llevó a Bilbao a Mark González pese a que el jueves fue descartado por los médicos, optó finalmente por dejar al chileno en el banquillo, volvió a dar la titularidad a Cañas –que no merece comerse este marrón– y apostó por Damiá en la banda derecha, escorando a Edu a la izquierda y con Oliveira en punta. Lo de este último es realmente preocupante: su partido de ayer fue ruinoso y sus pies desperdiciaron las mejores ocasiones de gol verdiblancas: una clamorosa que le sirvió Emana (34’) y le sacó Armando, otra que le facilitó Arzu (54’) a la salida de una falta y mandó a las nubes desde el punto de penalti, y una tercera que le volvió a habilitar Emana (58’) tras un buen pase en profundidad que remató muy mal.

El Betis no tuvo más remedio que coger las riendas del partido porque los bilbaínos, limitadísimos técnicamente, recularon de forma voluntaria para defender ese 1-0 que les asegura la permanencia un año más en Primera. Y además de las ocasiones de Oliveira, gozó de otra muy clara Emana (43’) que resolvió de nuevo el meta Armando en un afortunado mano a mano. El cuarto de hora final de la primera parte y los diez minutos iniciales de la segunda: ese fue el único ratito que jugó el Betis y dio la impresión de poder empatar el pleito. El resto, impotencia, bochorno y vergüenza ajena. Con los cambios, Noguès no arregló nada. Emana empezó a querer hacer la guerra por su cuenta, a Edu se le fundieron definitivamente los plomos y Oliveira era el vivo reflejo de la desintegración sufrida por este equipo, que no hace mucho electrizó San Mamés –¿recuerdan el 4-4 de la 2004/05?– con un fútbol de muchos kilates y ayer pasó por el Bocho como alma que sólo espera que se la lleve el diablo.

Noguès: 'El rival nos gana con muy poquita cosa'

Llevamos cuatro partidos sin puntuar y hay que ser realistas, ahora es cuando hay que ver al Betis para trabajar más aun y sacar esto adelante”, pidió Josep Maria Noguès en la sala de prensa de San Mamés, donde lamentó el enésimo traspié de su equipo y la forma en que pierde partido tras partido: “Justo antes del gol habíamos tenido una ocasión muy clara de Edu en la que todos cantábamos ya gol. Luego nos marcan y el resultado adverso nos condiciona. Estamos trabajando con presión pero nos falta definición. Hemos tenido ocasiones para marcar y llevarnos algo más, pero el equipo está en una dinámica negativa. El vestuario está muy tocado. Se ha podido ver un gran esfuezo físico, se ha querido ganar hasta el minuto 96 y volvemos a tener sensación de rabia e injusticia. No estamos acertados y el contrario, con muy poquita cosa, nos ha hecho uno. Ricardo no ha tenido que intervenir en ninguna ocasión más. No nos queda otra que asumirlo”, reconoció.

Noguès insistió luego en que “el trabajo del equipo no se ajusta a los puntos que está consiguiendo”. “El descenso está ahí, pero dependemos de nosotros y lo que queda es hacer piña, estar unidos, estar juntos y de una vez por todas ganar ese partido. Nadie se va a esconder, yo he hecho todo lo que he podido, he dado al equipo todo el aire ofensivo que podía darle, pero algo estamos haciendo mal cuando el contrario nos marca con muy poquito”, sentenció el catalán.