La afición verdiblanca ya conoce las camisetas que lucirán los futbolistas béticos en la temporada 2012-2013, ya que esta noche se ha producido la presentación de las nuevas equipaciones a cargo de Macron, sponsor técnico del Real Betis Balompié para las siguientes cinco campañas. La exposición, celebrada en el Hotel Al-Andalus, ha servido para presentar todo el material deportivo que lucirán los profesionales de la primera plantilla en la próxima edición de la Primera División, teniendo lugar la puesta en escena de la ropa de entrenamiento en la sesión de esta mañana. 

Fabricio, Rubén Castro, Vadillo y Beñat, modelos para una ocasión tan especial, revelaban el secreto mejor guardado de Macron en los últimos meses. La primera casaca, la verdiblanca, con un cuello clásico, basa su toque diferencial en una franja verde en la parte superior de la misma. La segunda de las equipaciones, de cuello redondo y con tono verde, mantiene la esencia a pesar de la innovación buscada en el diseño, mientras que la tercera indumentaria, la más novedosa, utiliza un color azul marino y cuello de pico, recurriendo a un tejido elástico y ajustado al cuerpo que favorece la transpiración y evita la sudoración excesiva sobre el terreno de juego. Mientras tanto, la camiseta de guardameta, emplea una tonalidad celeste para conseguir un refinado atractivo gracias a la elegancia italiana de los diseños.

Asimismo, el acto ha contado con la participación de varios futbolistas campeones de la Copa del 77, encargados de entregar las nuevas camisetas a los jugadores de la actual plantilla, cobrando especial trascendencia el momento en el que uno de los mitos de la entidad, Julio Cardeñosa, transfería los poderes del '10' al internacional Beñat. Antonio Biosca (coloca la camiseta a Rubén Castro), José Ramón Esnaola (enfunda la zamarra a Fabricio) y Juan Antonio García Soriano (entrega a Vadillo), ganadores de la Primera Copa de Su Majestad El Rey, también estaban presentes en el acontecimiento, ofreciendo el relevo generacional a los jugadores de la primera plantilla entregando unas camisetas custodiadas con escrupuloso celo hasta el día de hoy, expresando el deseo de que "ojalá hagan historia en la entidad vistiendo estas camisetas".