El partido que creo que nunca olvidaré fue el de Champions con el Chelsea... qué partido, qué juego, qué gol de Dani... la lástima fueron las lesiones que se produjeron ese día, en especial la de Olivera. Mis amigos no béticos me dicen que los béticos vivimos de ese 1-0, pero es que es para tenerlo siempre en la memoria.